Daddy Yankee regresa con nueva música, fe renovada y un show gratuito en Argentina

Por: Evelyn Vizcaíno

El “Big Boss” vuelve a los escenarios con “Sonríele”, un himno de esperanza que marca el inicio de su etapa más íntima y transformadora.

Después de haberle dicho adiós a los escenarios en 2022 con su gira “La Última Vuelta”, Daddy Yankee vuelve a encender los reflectores. Pero esta vez, el regreso no se mide en beats por minuto ni en listas de éxitos, sino en propósito: una nueva etapa marcada por la fe, la inspiración y, por supuesto, música inédita.

El ícono del reguetón anunció el lanzamiento de su nuevo sencillo, “Sonríele”, disponible a partir del jueves 10 de julio en todas las plataformas digitales. La noticia llegó acompañada de un tráiler cargado de emoción y simbolismo, protagonizado por el propio Yankee junto al actor puertorriqueño Anthony Ramos, conocido por su trabajo en Broadway y Hollywood.

Pero el anuncio no se queda solo en la música. Daddy Yankee también confirmó su regreso en vivo con un show especial y gratuito en Argentina.

El concierto se celebrará el sábado 19 de julio en el Microestadio Eva Perón de Lomas de Zamora, como parte del encuentro espiritual “Cachorros de León Fire 2025”. La entrada, destinada a mayores de 12 años, podrá reservarse mediante código QR.

“Estoy en una etapa donde quiero utilizar mi voz y mi música para inspirar, para llevar esperanza”, comentó el artista. “Este regreso no es solo mío, es un testimonio de lo que Dios puede hacer con un corazón dispuesto”.

Desde su retiro oficial, Raymond Ayala —su nombre real— ha compartido públicamente su conversión al cristianismo, dejando entrever un profundo cambio en su vida personal y profesional. Su música, sin perder el sello que lo catapultó a la cima del género urbano, ahora también habla de fe, transformación y propósito.

Con “Sonríele” y sus anteriores lanzamientos como “En el Desierto”, el intérprete reafirma que es posible evolucionar sin renunciar a la esencia. Daddy Yankee no solo regresa: se reinventa. Y lo hace con la claridad de quien sabe que el verdadero poder de la música no está solo en mover masas, sino en mover corazones.