Farándula y Espectáculos
La influencia digital marcó el cierre de la Feria del Libro Panamá 2025

Por: Evelyn Vizcaíno
La Feria Internacional del Libro de Panamá 2025 bajó el telón con un tema tan actual como inevitable: la influencia en la era digital.
El escenario reunió a tres voces distintas, unidas por un mismo hilo conductor: la pasión por lo que hacen y la manera en que las redes sociales transformaron sus vidas.
El actor y director Elmis Castillo fue directo: sin las plataformas digitales, probablemente no habría podido realizar sus películas. “He tenido días grandes y otros bajos en resultados, pero lo importante es empezar.
Con un buen celular y ganas de echar para adelante, se puede”, confesó. Relató además que ha trabajado con marcas reconocidas en Panamá, que ha viajado gracias a su contenido y que, aunque comparte mucho con sus seguidores, mantiene su vida privada al margen.
Incluso reveló que maneja más de una cuenta, incluyendo una dedicada a la psicología y el arte, disciplinas que estudia porque —según afirma— “para escribir guiones, también hay que cuidar la mente”.
En un tono distinto, la bailarina y presentadora Moyra Brunette narró cómo el baile se convirtió en su salvavidas durante la pandemia. “Empecé a grabarme porque no sabíamos qué iba a pasar, y mucha gente se unió a la academia.
Eso lo tomé como algo positivo”, recordó. También habló sin rodeos de las críticas que recibe: “Me dicen que a los 60 años debería estar cuidando nietos, pero yo sigo aquí, enseñando y dejando un legado”.
Para ella, la clave está en moverse, en hacer lo que se ama, porque eso también fortalece la salud mental.
El cierre del conversatorio estuvo a cargo del diseñador Tony Vergara, quien habló de inspiración y buena energía. Sus publicaciones buscan transmitir amor y vibras positivas. “A veces me inspiro en 30 minutos, otras veces en tres días, pero siempre trato de dar lo mejor”, comentó.
Entre anécdotas, risas y confesiones, los tres coincidieron en que la verdadera influencia no se mide en números, sino en la dedicación y la autenticidad. Así culminó la feria: recordando que, más allá de algoritmos y pantallas, lo que realmente conecta es hacer lo que apasiona.