Noti Rápidas
Panamá impone jerarquía y avanza a la siguiente fase rumbo al mundial

Por: Evelyn Vizcaíno
En una noche de ritmo controlado y ejecución quirúrgica, Panamá superó sin sobresaltos a Nicaragua con un marcador de 3-0, cerrando con autoridad la segunda ronda de las eliminatorias rumbo al Mundial 2026.
Fue el 10 de junio en el Rommel Fernández, pero el resultado empezó a construirse mucho antes: en el proceso, en la convicción y en la solidez de un grupo que parece entender que los partidos se ganan tanto con técnica como con madurez.
El marcador se abrió al minuto 56, cuando César Yanis finalizó con calma una jugada bien elaborada desde la izquierda, tras pase de Azarías Londoño.
Luego, con Nicaragua visiblemente desgastada, Ismael Díaz sentenció con un disparo seco desde fuera del área, y en el tiempo añadido, Eric Davis, recién ingresado, puso la rúbrica con un cabezazo preciso tras un centro de Michael Murillo.
Doce puntos de doce posibles. Ningún gol en contra. Panamá no solo avanzó, sino que dejó claro que su discurso de “competir en serio” no es retórica. Nicaragua, pese a la derrota, también clasificó, reflejo de un grupo parejo donde la diferencia estuvo en los detalles.
Declaraciones que explican más que el resultado
Marco Antonio Figueroa, seleccionador de Nicaragua, no rehuyó el análisis. Admitió la superioridad panameña, pero no sin defender el esfuerzo de los suyos: “En igualdad de condiciones, el partido pudo terminar 1-1.
Pero los cambios obligados nos dejaron con diez y eso pesó en los últimos minutos”.
Del otro lado, Thomas Christiansen habló menos del marcador y más del momento: “Esto refuerza lo que venimos construyendo.
No se trata solo de ganar, sino de cómo lo hacemos y qué dejamos listo para lo que viene”. El técnico panameño aprovechó el encuentro para dar minutos, ajustar variantes tácticas y confirmar que nombres como Andrade y Davis están listos para la próxima etapa.
Un ranking que también cuenta la historia
El triunfo no solo deja a Panamá como líder invicto del Grupo D, sino que también le permite alcanzar el puesto 31 del ranking FIFA, su mejor ubicación bajo el mando de Christiansen.
Más allá del número, el ascenso simboliza la consolidación de un proyecto que ya no se mide solo por lo que promete, sino por lo que ejecuta.
A las puertas de la Copa Oro, Panamá no solo clasifica. Se reafirma.